No puedo recordar sin dolor

Ahora que los años han pasado, que llegar a casa es casi una rutina, ahora es cuando un martes breve, tras el laburo vuelvo a mi hogar y estupidamente la razon se me llena de nostalgia, es que el laberinto de la memoria, traicionero como es, me trae añoranzas, curioso, al ver a los CarabiGope apostados en legion a la salida de mi domicilio, no hay temor, ese que antaño me congelaba, ni siquiera hay respeto, solo nostalgia de tiempos pasados, cuando los arraces de la dictadura se dejaban caer en cada protesta, en cada acto ciudadano, cuando los hermanitos combatientes aùn vivian, y pregonagaban desde su liceo de aplicaciones, fuera la dictadura, eran tiempos entonces en que uno se topaba con ataudes de carton tamaño natural, en Cumming con Alameda.
Por ahi se escuchaba mucho la Cooperativa en el 76 am, se sentia el peso de la represion, se sabia de los hermanitos Vergara asesinados
a pasos de donde vivo ahora, se escuchaba hablar de degollados, de bandos y toques de queda, la emocion, la adrenalina era cada dia, todo era velado si, la verdad era emocionante porque la teniamos a medias, el resto era mito, se formaba de boca a boca, que no que los sacaron de su casa y los mataron, no, si se escondieron en los blocks de las rejas y agarraron primero a uno luego el menor salio a defenderlo y lo mataron de un balazo en la nuca, cuentos de terror, que eran susurrados, y que nos secaban la garganta.
Que los aleonaban, decia otro cuento, los pacos son aleonados antes de salir a la calle, los arengan, son como perros en celo, salen a matar, les dan ascensos por comunista muerto...
Ahora, la cancion ya no es la misma, Fidel ya no me emociona con su discurso, la Cantata de Santa Maria me parece solo una leccion de historia, y no una historia latente como en aquellos años.
"Tio caiman" me da la impresion de una cumbia y no de de un himno como entonces .
Me voy a ver una pelicula en el cable mejor, chau.

1 comentario:

Ángel mutante dijo...

Ojalá hayas visto "las relaciones peligrosas".
Gracias por tu visita.
Un besito antifascista y otro más bien lujurioso.
Chaooooo.